Fotografía: Adrià Goula

El proyecto es la reforma de una vivienda ubicada en el interior de una manzana de los años 80 de la calle Casanova, en el Eixample Esquerre de Barcelona.
Al definir la nueva espacialidad de la casa según requisitos programáticos del cliente, se tiene en cuenta el aprovechamiento máximo de la luz y la interelación visual de cada uno de los espacios, entendiendo la casa como una unidad formada por distintos fragmentos con identidad propia.
Se busca una precepción total y constante de todo el conjunto por el usuario desde cualquier punto de la casa. El espacio visual fluye de la misma manera que lo hace el recorrido.