publicado en La Vanguardia (03/04/2011)
Isabel de Villalonga - Fotos: Lluís Casal
Afirma el arquitecto Lluís Clotet que lo que más le apasiona de un proyecto es el reto de enfrentarse a unos límites y resolverlos de la mejor manera posible. En este caso el desafío consistió en ubicar una vivienda unifamiliar en una parcela de una urbanización de los años cincuenta y, solventando las ordenanzas, aislarla de las edificaciones contiguas. "Se trataba de un terreno prácticamente rectangular y llano, pero no lo suficientemente grande como para que su tamaño nos aislara de los vecinos".
Lluís Clotet (Barcelona, 1941) es poco amigo del autobombo y la ostentación. Su arquitectura es inteligente y reflexiva, capaz de resolver de la mejor manera posible el problema planteado. Galardonado con el premio Nacional de Arquitectura 2010, ha merecido además numerosos premios FAD (restaurante La Balsa, Barcelona; Banco de España, Girona; casa Rognioni, Sant Cugat, o Nave Simón, Canovelles). En 1964, con Oscar Tusquets, Cristian Cirici y Pep Bonet, fundó el Estudio Per, colaborando juntos en muchos proyectos (casa Regàs y Belvedere Georgina, Llofriu; casa Vitoria en la isla de Pantelleria.) En el año 1983 se asoció con el arquitecto Ignacio Paricio, produciendo obras de notable sobriedad y elegancia, la mayoría de ellas en Catalunya (transformación del Depósito de las Aguas en biblioteca Universitaria, Barcelona; rehabilitación del Convent dels Àngels,Barcelona; dependencias municipales, Sant Pere de Ribes, y viviendas en Diagonal Mar).
"Las ordenanzas - añade-nos obligaban a colocar la casa a cinco metros de la calle y a tres metros de la del vecino y de su zona ajardinada, por lo que tampoco nos permitían situar la vivienda apoyada en los límites del solar, abierta a unos patios interiores íntimos. En definitiva, todo conducía inevitablemente a la aparición de esta banda de estrechos espacios perimetrales que rodean a las edificaciones en la mayoría de urbanizaciones de casas aisladas, retales sin entidad, inútiles, descontrolados, perdidos, dominados visual y acústicamente por vecinos y peatones.
El proyecto partió así de la voluntad de recrear estos espacios residuales y dotarlos de un sentido arquitectónico. Para conseguir este objetivo se construyó una valla de madera con la máxima opacidad permitida y de casi dos metros de altura, que recorre todo el perímetro del jardín prolongando las divisiones interiores que definen las estancias de la vivienda y proporcionándoles a su vez la necesaria intimidad. Aquellas bandas absurdas se transformaron así en una serie de patios de marcada calidad espacial. A cada uno de ellos le corresponde una dependencia interior y, al revés, a cada dependencia interior le corresponde un patio. Para favorecer esta conexión, la fachada de la vivienda se proyectó en cristal transparente, de modo que la casa acabó adueñándose de todo el jardín y todo el jardín de la casa. Una iluminación tenue de la valla contribuye, también por la noche, a hacer realidad esta intención.
El edificio, de una sola planta, adoptó la forma de un prisma. La losa horizontal de la cubierta se apoya en unos pilares metálicos yuxtapuestos al vidrio de fachada. Tan sólo un elemento, una caja de hormigón oscuro, que corresponde el recibidor, absorbe los esfuerzos horizontales. De esta manera se consigue una planta absolutamente libre que puede modificarse fácilmente. Un sótano resuelve las instalaciones.
La casa se organiza en el interior alrededor de la sala de estar/ comedor y la cocina que, por expreso deseo del propietario a quien le gusta mucho cocinar, se convierte en protagonista de este espacio, pudiendo integrarse o aislarse a voluntad mediante un sistema de persianas enrollables.
Hacia el lado de levante está situada la suite de los propietarios, su dormitorio, con el vestidor, el baño y el estudio incorporado. A poniente, las habitaciones de los invitados, tres dormitorios con sus correspondientes cuartos de baño. Todas las estancias interiores tienen una puerta en contacto con la fachada, de manera que en casos especiales, todas las dependencias se comunican entre sí y la casa se convierte en un espacio único.
El recorrido perimetral puede hacerse también por el exterior a través de los patios. Para protegerse de la intensa luz mediterránea y garantizar la oscuridad durante la noche, los vidrios de la fachada disponen de visillos y foscurits enrollables con mando a distancia. Además, unas generosas pérgolas horizontales de lamas de aluminio móviles garantizan la protección solar en aquellas orientaciones que son necesarias. Cuatro lucernarios a norte iluminan los baños de invitados y la sala de máquinas, únicas dependencias que no tienen contacto con la fachada.
La casa se organiza en el inte- rior alrededor de la sala de estar/ comedor y la cocina que, por ex- preso deseo del propietario a quien le gusta mucho cocinar, se convierte en protagonista de este espacio, pudiendo integrarse o aislarse a voluntad mediante un sistema de persianas enrollables. Hacia el lado de levante está si- tuada la suite de los propietarios, su dormitorio, con el vestidor, el baño y el estudio incorporado. A poniente, las habitaciones de los invitados, tres dormitorios con sus correspondientes cuartos de baño. Todas las estancias interio- res tienen una puerta en contac- to con la fachada, de manera que en casos especiales, todas las de- pendencias se comunican entre sí y la casa se convierte en un es- pacio único. El recorrido perime- tral puede hacerse también por el exterior a través de los patios.
Para protegerse de la intensa luz mediterránea y garantizar la oscuridad durante la noche, los vidrios de la fachada disponen de visillos y foscurits enrollables con mando a distancia. Además, unas generosas pérgolas horizon- tales de lamas de aluminio móvi- les garantizan la protección solar en aquellas orientaciones que son necesarias. Cuatro lucerna- rios a norte iluminan los banños de invitados y la sala de máqui- nas, únicas dependencias que no tienen contacto con la fachada.
Para protegerse de la intensa luz mediterránea y garantizar la oscuridad durante la noche, los vidrios de la fachada disponen de visillos y foscurits enrollables con mando a distancia. Además, unas generosas pérgolas horizon- tales de lamas de aluminio móvi- les garantizan la protección solar en aquellas orientaciones que son necesarias. Cuatro lucerna- rios a norte iluminan los banños de invitados y la sala de máqui- nas, únicas dependencias que no tienen contacto con la fachada.
1 comentario:
Podéis ver mas información sobre este proyecto de Lluís Clotet e Ignacio Paricio con ABEBA arquitectes S.L.P, en la pagina web de nuestro estudio (www.blog.mendezdelpozo.com) donde Miquel del Pozo, socio fundador de mendezdelpozo_arquitectos, realizo las tareas de coordinador de proyecto y obra. En el siguiente enlace: http://www.blog.mendezdelpozo.com/2012/03/casa-en-olot.html
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