Herreros arquitectos | Casa Garoza 10.1

por Jordi Badia

Dos razones por las que este proyecto me parece interesante:
La primera, porque proviene de uno de los estudios de arquitectura español que en este momento merece más mi respeto. Juan Herreros (Herreros Arquitectos) ha iniciado en esta etapa en solitario desde su ruptura con Iñaki Abalos una deriva hacia proyectos más austeros y rotundos que me parece sumamente interesante. 
La segunda, porque se trata de un esfuerzo de investigación en el campo de la arquitectura industrializada. Un campo, que desde mi humilde punto de vista, tiene un extraordinario futuro.

Sólo hace falta ver, cuando uno observa las fotografías de las primeras obras de Le Corbusier y sus contemporáneos donde muchas veces aparecen automóviles, el enorme salto  formal y tecnológico que ha experimentado el diseño automovilístico comparado con el arquitectónico (esas casas aparecen hoy en día como completamente contemporáneas). Ello se debe sin duda a que la arquitectura no ha entrado nunca en el mercado de la fabricación en serie. El día que lo haga y grandes empresas (Apple, Smart, etc...) inviertan tiempo y dinero en el desarrollo de su tecnología, muy probablemente la arquitectura evolucionará como no lo ha hecho hasta ahora.
Hasta que llegue ese momento, algunos arquitectos serios y respetables, tratan de buscar mecanismos para producir casas en serie en fábricas que permitan condiciones de clima más favorables que la intemperie para un trabajo más preciso. Estos intentos lograran en un futuro la construcción de casas más económicas, fiables y bien equipadas que los procesos tradicionales, demasiado burdos para la tecnología contemporánea.

Casa garoza 10.1 es la primera aplicación del prototipo industrializado, ajustado a las necesidades y personalidad de sus propietarios. Para consultas sobre otros prototipos contactar con:estudio@herrerosarquitectos.com

Prototipo de vivienda industrializada modular que permite crecimientos y cambios en el tiempo. Todos los sistemas constructivos son en seco. Con ellos se fabrican en taller unidades completas con todos los acabados interiores del tamaño máximo que admite el transporte convencional (3m de ancho, 2’50 de altura, y hasta 12 de longitud).

Unicamente la última capa de la fachada y la cubierta se colocan in situ para asegurar continuidad, solape e impermeabilización de los encuentros. Particiones interiores, almacenajes y mobiliario fijo son incorporados a los paramentos verticales, que alojan instalaciones de gran calidad técnica, domótica y otros elementos personalizados para cada configuración. El conjunto resultante, ofrece calidad, control sobre el tiempo de ejecución, planes de mantenimiento y opciones de crecimiento muy superiores a la construcción tradicional. Los principios de la economía sostenible y el espíritu del reciclaje acompañan todas las decisiones del proyecto.